Allí había una mirada para mí. Y fue entonces cuando decidí
que todo podía cambiar. Todavía estaba a tiempo de seguir porque sabía que
alguien confiaba en mis posibilidades y mi esfuerzo no caería en olvido. Había
una mirada para mí y podría ser consciente de que me seguiría allá donde yo
decidiera continuar mi camino. Sería algo así como un reflejo de mi paso por su
vida, como un pequeño instante en el que yo quedaría grabado en su retina y por
tanto podría experimentar miles de fantasías y hasta soñar con deseos que no se
cumplirían por falta de tiempo. Pero estaba allí, reflejándose en mis ojos. Y todo,
a partir de ahora, merecería la pena. Sobre mi cabeza volaban los ingenios de
un futuro mejor mientras seguía buscando poner fin a las campanas que sonaba n
anunciando tristes días. Atrás quedaban las huellas un pasado alejándose tras
mis pasos. Desde este instante, mi estrella polar sería su mirada.
jueves, 24 de noviembre de 2011
lunes, 21 de noviembre de 2011
Volver
Se había levantado de la cama sin hacerlo durante varios
meses. Parecía mentira que después de tanto tiempo pudiera levantarse sin ni
siquiera tambalear su cuerpo sobre las sábanas, raídas y amarillas que yacían
en la cama. Simplemente se levantó, como lo hacía cada mañana antes de que se
postrara en aquel lugar sin poder levantarse. Se dirigió a la ventana. El sol
entraba por ella iluminando hasta los rincones más oscuros de un habitáculo que
parecía más una cárcel que otra cosa. Y allí, justo en el mismo instante en el
que el frío del metal le recorrió las manos al apoyarlas sobre la ventaba,
divisó el paisaje que tanto tiempo esperó. Los barcos entraban en la esclusa y
salían del puerto como cada mañana. Los marineros se enrolaban en la marina y
las gentes del mar iban con cajas de pescado de un lado a otro, mientras las
gaviotas despertaban al pueblo ante un nuevo amanecer. Decidió entonces que era
el momento de volver a la vida. Y así, sin más, se abrochó los zapatos, se
lavó la cara y fue dispuesto a volar,
sin necesidad de tener que andar sobre sus pies.
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